Hospital de Monkole

El Centro Hospitalario Monkole (CHM), una de las iniciativas de CECFOR Asbl, creado inicialmente para ser un centro de administración de asistencia sanitaria en apoyo de las poblaciones pobres de la periferia suroeste de Kinshasa, especialmente en la zona sanitaria de Mont-Ngafula, fue llamado a desempeñar el papel de Hospital General de referencia por un acuerdo de asociación firmado con el Estado congoleño, lo que llevó a cubrir y atender a una población más amplia, más allá de sus zonas previamente previstas.

El CHM se distingue de los estándares reconocidos de la ciudad de Kinshasa, por la calidad de su personal, resultado de su esfuerzo de formación continua desde hace ya varios años; pero también por la limpieza, la calidad de sus locales y su programa informático de gestión integrada, con una oferta de servicios que incluyen: gineco-obstetricia, medicina interna, pediatría y cirugía; el servicio de urgencias y la Unidad de cuidados intensivos; los servicios ambulatorios, los servicios médico-técnicos de farmacia, laboratorio, diagnóstico por imagen y esterilización; los servicios técnicos de apoyo como son el Servicio de Base (limpieza, lavandería, restauración), los Servicios Generales, la Morgue, el servicio de producción de gases medicinales, el servicio informático; los servicios administrativos: gestión, recepción, contabilidad, comunicación, tesorería, facturación y cobro, así como el departamento de compras y logística; el departamento de atención primaria y proyectos, que gestiona los tres centros de salud situados en los barrios periféricos de las Comunas de Mont-Ngafula y Selembao; el Centro de Tratamientos Ambulatorio para infecciones, tratamiento y seguimiento del VIH, la tuberculosis y otras infecciones. 

Hasta la fecha, los pacientes de todos los servicios del Hospital se clasifican en cuatro categorías que son: Categoría A que corresponde a los pacientes muy pobres que sólo pueden pagar una tarifa muy moderada; Categoría B que corresponde a los pacientes privados con bajos ingresos que sólo pueden pagar una tarifa moderada; Categoría C que corresponde a los pacientes cubiertos por empresas en convenio que pueden pagar la tarifa estándar; Categoría D que corresponde a pacientes privados adinerados que pueden pagar una tarifa más elevada.

No ocurre lo mismo en los centros de salud dependientes del Hospital Monkole: en estos centros de salud (comúnmente llamados antenas) Elina, Moluka y Kimbondo, situados en zonas pobres y aisladas, sólo hay dos de las categorías: A y B. Estas categorías están idénticamente identificadas a las del centro principal, pero no comparten ni el sistema de referencia de las tarifas ni el posicionamiento relativo como en el caso del centro principal.

Hospital Monkole Neonatología

La Dra Kasadi (foto 1) : una madraza y jefa en la planta de Neonatología en el Hospital de Monkole ¡Qué vocación tan marcada!

Lleva trabajando 25 años como Médico y comenzó como médico generalista en los Centros de Salud de Eliba, Moluka y Kimbondo, donde forjó su ilusión por trabajar en la pediatría y desarrollo de los bebés.

A finales de 2010 terminó su especialidad en pediatría y, desde el 2014, es la Directora del departamento de Pediatria, especializada en Neonatología.

El próximo reto es su tesis doctoral acerca de la evolución, de los niños prematuros a partir de las 27 semanas de la mano de Carlos Chaccou e IS Global. Antes era impensable que un prematuro viviese con esa edad en Kinshasa y ahora, con toda la labor que impulsó la Doctora, ha cambiado esa realidad.

Hay que impulsar y apoyar este tipo de iniciativas locales impulsadas por los propios locales de gran potencial e intentar conseguir profesionales congoleños con el mismo nivel. Porque no es que valga la pena es que merecen la vida, literalmente. Por cada profesional como la Dra Kasadi, salvas muchas vidas.

En la planta de neonatos: 17 prematuros entre 27 y 33 semanas de gestación para sacar adelante aunque la unidad de cuidados intensivos de neonatología solo tiene 12 plazas.

Están pensando en una ampliación a 18 bebés aunque es un servicio deficitario por el enorme coste que se compensa con creces con la vida de estos pequeños bebés. Es un paso adelante sacar estos prematuros adelante por el desarrollo de la unidad.

Hospital Monkole Raquitismo

Tuve el honor de participar en una operación de raquitismo en Kinshasa, una enfermedad muy común en Africa y, en especial, por aquí.

Hoy tuve la suerte de asistir como Director Creativo una operación de raquitismo en el Hospital de Monkole. Es impresionante ver cómo quedan luego y lo felices que están. He presenciado toda la operación y debo decir que la cirugía es un arte… les deja como nuevos y tienen la posibilidad de, no sólo volver a caminar bien, sino también de jugar al fútbol, bailar y tener un futuro sano.

Los síntomas incluyen retraso en el crecimiento, piernas arqueadas, debilidad y dolor en la columna vertebral, la pelvis y las piernas.

Un ablandamiento y debilitamiento de los huesos en los niños, generalmente debido a la insuficiencia de vitamina D. La vitamina D promueve la absorción del cuerpo de calcio y fósforo. La falta extrema o prolongada de vitamina D hace que sea difícil mantener los niveles adecuados de calcio y fósforo en los huesos, lo que puede causar raquitismo.

Antena de Monkole: Moluka

Centro Social Moluka, una de las tres antenas de Monkole ubicado en las periferias de Kinshasa.

Por un lado, cuentan con un dispensario en el que reciben a niñas y mujeres que se encuentran en situación de calle, que no tienen estudios o formación académica y se las alfabetiza y se les educa en lo básico del lenguaje y la vida para que luego puedan aprender costura. No se les exige ningún nivel y es impresionante cómo aprenden rápido y confeccionan prendas con diseños espectaculares.

El objetivo es que aprendan estos oficios para poder mantener a sus familias en un futuro o a ellas mismas. Obvio que me mandé a hacer una camisa con los colores típicos del Congo y me voy muy agradecido por el cálido recibimiento.

Por el otro, está el dispensario en donde se da atención ambulatoria a las personas de allí. Hay un equipo de enfermeras y médicos que llevan toda la labor y envían la información de los pacientes a Monkole. Ha sido un poco más dura la experiencia aquí debido a la zona en la que se ubica y el numero de personas que atiende a diario.

Antena de Monkole: Eliba

Centro Social Eliba, una de las tres antenas de Monkole ubicado en las periferias de Kinshasa.

Por un lado, cuentan con un dispensario en donde se da atención ambulatoria a las personas de allí. Hay un equipo de enfermeras y médicos que llevan toda la labor y envían la información de los pacientes a Monkole. Ha sido un poco más dura la experiencia aquí debido a la zona en la que se ubica y el numero de personas que atiende a diario. 

Antena de Mokole: Kimbondo

Centro Social Kimbondo, una de las tres antenas de Monkole ubicado en las periferias de Kinshasa.

Por un lado, cuentan con un dispensario en donde se da atención ambulatoria a las personas de allí. Hay un equipo de enfermeras y médicos que llevan toda la labor y envían la información de los pacientes a Monkole. 

CFP Kimbondo

El Centro de Formación Profesional Kimbondo fue creado en 1991 por el Centro COngoleño de Cultura, Formación y Desarrollo, con acrónimo CECGOR asbi.

En 2016, su gestión fue cedida a ADEFOR (Asociación para el desarrollo y formación). Su acción se centra en el desarrollo integral de las competencias de aprendizaje de los jóvenes congoleños, principalmente las mujeres, en el ámbito de los servicios de hostelería y restauración.

El modelo de enseñanza presentado por sus programas es el de la formación dual que consiste en la conducción conjunta de la formación dentro de la escuela hostelera y en las empresas de acogida mediante situaciones profesionales. 

Con este modelo, el proceso de aprendizaje se basa en dos pilares: la excelencia en el servicio y la integridad personal.

Sus programas incorporan estas dos dimensiones en una perspectiva de desarrollo profesional global. Ofrecen, para ello, una visión de los aspectos más influyentes de las diferentes ramas de las hostelería y un conjunto de temas transversales que permiten cubrir la necesidades macro y micro del sector. El aprendizaje se apoya a través de talleres prácticos orientados a situaciones reales y en prácticas de perfeccionamiento en empresas bien dirigidas.

Los retos de la eficiencia en la gestión de los servicios forman parte de las cultura del Centro de Formación Kimbondo. A lo largo de los años, sus profesores han trabajado en la formación de profesionales que contribuyen, hasta la fecha, al crecimiento de la República Democrática del Congo y a la mejora de la calidad de vida de su población.

Misión: Ofrecer a jóvenes y adultos una formación profesional de calidad en el sector de los servicios; promover puestos de trabajo cualificados; apoyar la productividad de las empresas de servicios; desarrollar estándares de calidad de los servicios del sector de hostelería y la restauración de la República Democrátic del Congo.

Visión: Desarrollar la formación profesional en la República Democrática del Congo para que las mujeres y los hombres jóvenes sean aptos para participar en el crecimiento económico y social del país.

Valores: Calidad en la formación y los servicios; Profesionalidad y honestidad; Responsabilidad social; prioridad a la formación para el empleo.

 

Desnutrición en Kimuenza

Esta es la gran labor que llevan a cabo Las Misioneras de Cristo Jesús fundadas en Javier (Navarra) en 1944: atienden a niños con desnutrición en Kimuenza y acompañan a las familias hasta que se recuperan la criaturas.

Todos los viernes reciben a su grupo de madres, conformados por unas 150 mujeres y siguen la evolución de sus hijos de cerca. Con una bandita de colores, con el que se les mide el diámetro de su bracito, pueden determinar el estado de desnutrición en la que se encuentran los niños (rojo es estado grave, amarillo es crítico y verde es que están bien). Luego lo pesan en la balanza y, acto seguido, les entregan unas harinas que están preparadas con distintos ingredientes para nutrir al niño.

Lo que más me ha impactado es la calidad humana de las misioneras y sus ayudantes. Un cariño… un amor por lo que hacen y mucho amor también en cómo lo hacen… ojalá en los equipos de trabajo nos encontremos más personas así. Desinteresadas por el objetivo personal y totalmente preocupadas por la otra persona.

Las Misioneras de Cristo Jesús fundadas en Javier (Navarra) en 1944: las responsables de toda la actividad de los viernes. Son las que reciben a las familias y, junto a sus novicias y voluntarios de la parroquia, sacan adelante toda la labor.

Me quiero detener un poco más en la hermana que más me ha impresionado: Teresa Rius (mujer mayor con hábito verde), una hermana de la congregación de origen Catalán, que llegó a RDCongo (antiguo Zaire) en 1971 habiendo estudiado medicina en La Universidad de Navarra. Dedicó su vida a este sitio y, hasta el día de hoy, sigue ayudando a las familias.

Agricultura Kinsenso

Un ejemplo de resiliencia y fortaleza: ¡Qué emocionante esta experiencia! Me fui con el corazón muy “ablandado” de este sitio. Estas personas fueron diagnosticadas con enfermedades terminales y son marginados (la sociedad los quita del sistema e intenta no tenerlos cerca).

Crearon con CECFOR un proyecto para que, estas bellas personas, trabajen sus propias tierras agrícolas y luego puedan vivir vendiendo su producción.

¿Saben qué es lo que más me impactó? Que son FELICES. Disfrutan de lo que tienen y se cuidan entre ellos. Y nosotros nos quejamos tanto y todo el tiempo… y ellos son felices con lo que tienen. Un ejemplo de resiliencia y fortaleza a pesar de su enfermedad.

Otro tema que me emociona es cruzarme con personas que hacen estas iniciativas: no les da NADA de rentabilidad la inversión pero, como les he dicho, invierten en el cielo. Una entrega por las necesidades de los demás. Deberíamos aprender más a dejar ir lo que no importa y a enchufarnos en lo que realmente importa: el prójimo.

Recuerda que siempre habrá alguien que estará en peores condiciones que las tuyas ¡No te quejes! 

Parejas con más de 30 años de matrimonio compartiendo la misma enfermedad, cuidando uno del otro y trabajando su propia parcela. Para mi fue como una metáfora de la vida y muy inspirador: dos personas que cargan juntas su cruz de la enfermedad, se apoyan, se acompañan y se sostienen inclusive en el trabajo… el trabajo de su campo. Qué manera de dejarnos una lección a todos los que venimos de fuera… qué fuerte es ver a alguien que se encuentra peor que nosotros pero que, a pesar de todo lo que llevan, caminan con una sonrisa y se acompañan.

Soy un agradecido y un afortunado de estar aquí. Soy un afortunado por haber recibido el honor de tomar estas fotos. He congelado estos recuerdo para siempre y, cada vez que vuelva a ellas, tendré conmigo esas sonrisas.

 

Agricultura Ngombe Lutendele

Un ejemplo de resiliencia y fortaleza: ¡Qué emocionante esta experiencia! Me fui con el corazón muy “ablandado” de este sitio. Estas personas fueron diagnosticadas con enfermedades terminales y son marginados (la sociedad los quita del sistema e intenta no tenerlos cerca).

Crearon con CECFOR un proyecto para que, estas bellas personas, trabajen sus propias tierras agrícolas y luego puedan vivir vendiendo su producción.

¿Saben qué es lo que más me impactó? Que son FELICES. Disfrutan de lo que tienen y se cuidan entre ellos. Y nosotros nos quejamos tanto y todo el tiempo… y ellos son felices con lo que tienen. Un ejemplo de resiliencia y fortaleza a pesar de su enfermedad.

Otro tema que me emociona es cruzarme con personas que hacen estas iniciativas: no les da NADA de rentabilidad la inversión pero, como les he dicho, invierten en el cielo. Una entrega por las necesidades de los demás. Deberíamos aprender más a dejar ir lo que no importa y a enchufarnos en lo que realmente importa: el prójimo.

Recuerda que siempre habrá alguien que estará en peores condiciones que las tuyas ¡No te quejes! 

Parejas con más de 30 años de matrimonio compartiendo la misma enfermedad, cuidando uno del otro y trabajando su propia parcela. Para mi fue como una metáfora de la vida y muy inspirador: dos personas que cargan juntas su cruz de la enfermedad, se apoyan, se acompañan y se sostienen inclusive en el trabajo… el trabajo de su campo. Qué manera de dejarnos una lección a todos los que venimos de fuera… qué fuerte es ver a alguien que se encuentra peor que nosotros pero que, a pesar de todo lo que llevan, caminan con una sonrisa y se acompañan.

Soy un agradecido y un afortunado de estar aquí. Soy un afortunado por haber recibido el honor de tomar estas fotos. He congelado estos recuerdo para siempre y, cada vez que vuelva a ellas, tendré conmigo esas sonrisas.

 

Agricultura Ndiji Braserie

La cooperativa de agricultura, que se encuentra en Ndiji Braserie, cuenta con más de 140 agricultores que trabajan sus parcelas de tierra.

Un sitio muy bien organizado y muy profesional. Me ha impresionado la extensión de las parcelas y la cantidad de familias que están trabajando en ellas.

Está claro que los congoleños viven de la agricultura y es un sitio en el que se podría hacer mucho más bien del que ya está haciendo. Gracias al presidente, a CECFOR y a Nadin por haberme permitido llegar a este rincón de Kinshasa. Muy impresionado.

Agricultura Congo Central

Mujeres ejemplares en los proyectos de agricultura en Congo Central. Tuve el honor de conocer varias de las labores agrícolas de esta zona del país y me ha llamado la atención el rol de las mujeres.

Madres de sus niños, esposas de sus maridos y productoras de sus tierras. Todo el día con los tres roles bien marcados y con una garra que nos e dan una idea. Todas con una sonrisa en sus rostros y con ese toque maternal. Algunas con sus niños al lado.

La verdad que admirables y un ejemplo. Ojalá sepamos llevar todo lo que nos toca con equilibrio y con una sonrisa. No siempre es fácil pero si se hace con voluntad, a la larga, se ordena todo y la jornada de trabajo no es tan pesada.